Conforme a la realidad profunda,
tal como es la realidad,
todos venimos del mismo magma.
Ígnio, líquido, ebullente
caldo de cultivo.
El tiempo avanza como un manso animal.
Obsedido por ir hacia el ocaso sigue su ruta interminable
entre las estrellas.
Toda la comparsa del Universo va,
a velocidades inimaginables,
a través del espacio.
El cambio continuo es la gramática del mundo.
