Roderico Rodríguez, escritor costarricense

Levitando después de recibir la comunión

Es el momento en que declina
la luz del día
hacia la noche.
Las cigarras encienden su potente
canto electrico.
El día ha transcurrido como más me gusta; leyendo y escribiendo.
Mañana es Viernes Santo
y la Iglesia de Roma tiene su celebración cúspide: la Crucifixión de Jesús.
Recuerdo borrosamente mi participación cuando niño en esas celebraciones.
Una vez desfilé como el apóstol San Juan y me dieron seis reales de aquel tiempo,
que eran setenta y cinco céntimos…
Me sentía levitando después de recibir la comunión.