La tarde amarilla
va cayendo en la palma de mi mano.
Los árboles, los pájaros, las plantas, el celeste cielo.
Es una totalidad orgánica
que se mueve y respira.
Vive, siente, duerme sufre.
Un marcado compás estival
de todo lo existente.
La tarde amarilla
va cayendo en la palma de mi mano.
Los árboles, los pájaros, las plantas, el celeste cielo.
Es una totalidad orgánica
que se mueve y respira.
Vive, siente, duerme sufre.
Un marcado compás estival
de todo lo existente.