Amar es un verbo impreciso, de muy lato significado.
Se ama a los padres.
Se ama a los familiares cercanos,
a los amigos.
Se ama a la mujer amada con amor de pareja,
y ahí sí que se pone peliaguda la cosa.
El amor filial, solidario, cariñoso, es una cosa.
Y otra cosa es el amor cuerpo a cuerpo,
lo más adentro posible uno en el otro,
a veces hasta la muerte.
El verbo amar se las trae.
Hay que tener cuidado hasta para decirlo,
porque no siempre significa lo mismo.
La mejor y más valiosa acepción del amor se da
en el gerundio del verbo,
en acción.