Hoy lunes amanecí creyendo que era sábado.
Y es que estamos en diciembre
y cambia la percepción del tiempo.
Recuerdo cuando muchacho
el entusiasmo en el ambiente.
Eran muchos los compromisos y las fiestas del mes.
Ahora, cuando mi vida está
en la cuenta regresiva,
escucho como un estruendo
en la ciudad,
pero no sé qué es,
ni precisamente dónde.