Cae lentamente la tarde
y mi ánimo con ella.
Viene la noche
y con la noche el sueño purificador.
Mañana será otro día.
La construcción. Mi casa. Estamos en las últimas. Por ahora.
Me pasaré a vivir en ella.
Y desde dentro la termino.
Ese ha sido mi modus operandi. Y se confirma una vez más.