Roderico Rodríguez, escritor costarricense

No hay escapatoria

A la hora de las horas
todos somos como somos,
al igual que somos todos.
Puede ser que en unos casos
sea más esto o lo otro,
pero llegado el momento,
somos como somos,
al igual que somos todos.
Y es que lo más seguro
es que todos somos uno
y uno somos todos.
No hay escapatoria,
ni donde esconderse o hacerse el desentendido.
La humanidad es nuestra condición.