Voy viviendo mi vida como por un lento declive que me acerca a la eternidad.
Sin grandes alteraciones ni tropiezos.
No niego que me gustaría volver a vivirlo todo otra vez. No es posible tal pretensión.
Pero tengo que vivir
como si el plazo que me queda por vivir
fuera mi vida entera.
Es cuestión de criterio y perspectiva.
De por sí,
la vida es un instante
que va de principio a fin.