Me encantan las mañanas,
el día,
andar por las calles y caminos, los múltiples parajes;
los árboles, las montañas, el cielo azul celeste, el mar eterno;
las bandadas de pájaros y sus cambiantes formas aerodinámicas, los ríos,
mi primer pasión, las quietas pozas profundas, las ruidosas cataratas;
reír, amar, leer, escribir, conversar;
ir y venir por aquí y por allá, acostarme y dormir cuando llega la noche.
Me encanta vivir.
Debo ser agradecido y valiente,
y aceptar sumiso
que un día todo acabará.